La reina emérita doña Sofía, presidenta ejecutiva de la Fundación que lleva su nombre, ha visitado este lunes, 14 de febrero, la Asociación Banco de Alimentos de la Costa del Sol (Bancosol) con el objetivo de conocer su gestión y funcionamiento diario. Durante la visita, se ha interesado por la labor y respuesta social que está llevando la asociación en estos momentos de pandemia de la COVID-19.
La reina Sofía ha conocido la gestión de Bancosol a través de una reunión de trabajo en la que su presidente, Diego José Vázquez, ha expuesto la evolución de este Banco de Alimentos, las acciones desarrolladas en estos momentos y los objetivos estratégicos que persigue, con el fin de poder atender cada vez mejor a las personas beneficiarias.
Posteriormente, y tras la firma en el libro de visitas, han recorrido las instalaciones del banco de alimentos, ubicado en el polígono Trevenez, donde la reina emérita ha mostrado su interés por conocer todo su funcionamiento.
Esta visita se inscribe, a iniciativa de la reina Sofía, en el marco de colaboración que su Fundación mantiene desde el año 2012 con los bancos de alimentos de toda España, con el fin de conocer sus necesidades y posibles vías de ayuda, en este tiempo tan complejo. A través de esta colaboración, Bancosol recibe anualmente donaciones de alimentos básicos indispensables en la alimentación de los beneficiarios.
Durante 2021, la Asociación Banco de Alimentos de la Costa del Sol-Bancosol distribuyó en toda la provincia 7.260.778 kilos de alimentos, tanto no perecederos como frescos, entre 184 entidades beneficiarias que, a su vez, ayudaron a cubrir las necesidades alimentarias de un total de casi 58.500 personas en el momento más duro de la pandemia.
El año se cerró con 53.419 personas beneficiarias, de las cuales casi 20.0000 son niños y 3.791 son lactantes. Esto fue posible gracias a los más de 83 voluntarios estables que colaboran a diario en Málaga.
El objetivo para 2022 «es seguir luchando contra el despilfarro de alimentos y la inserción laboral, y atender a todas las familias necesitadas de la provincia de Málaga, agradeciendo a todas las empresas que donan sus excedentes, así como a todas las entidades y personas particulares benefactoras y por supuesto, a todos los voluntarios que altruistamente realizan una labor encomiable y necesaria para que el Banco de Alimentos pueda realizar su labor diaria en favor de los más vulnerables de nuestra sociedad».
