La Policía Nacional ha desmantelado un cultivo de marihuana con 422 plantas en una vivienda ubicada en una finca de Campanillas y ha detenido a dos hombres por su presunta implicación en los delitos de tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico.
La operación, denominada ‘Canoa’, se inició gracias a la colaboración ciudadana, con una información que apuntaba a la existencia de una plantación de cannabis sativa en un inmueble de una finca rural en un diseminado de Campanillas.
Las pesquisas vinieron a confirmar que de la vivienda bajo sospecha emanaba un fuerte olor a marihuana, observándose, asimismo, el continuo funcionamiento de motores de aire acondicionado en la misma. Continuando con las indagaciones, la Policía comprobó que la instalación permanecía conectada supuestamente de forma fraudulenta a una torre eléctrica próxima, sin pasar por contador alguno.
En el transcurso de la operación, los agentes identificaron a dos personas que guardarían relación con la plantación; un varón, que realizaría funciones de cuidado del cultivo y que viviría en el inmueble, y otro residente en Vélez-Málaga, que sería el responsable directo de la producción. Ambos, de nacionalidad española y 31 años, fueron arrestados.
En el registro de la casa -arrendada a un tercero- se localizaron 422 plantas de cannabis, en proceso avanzado de secado, y se intervinieron, además, 1.460 euros y elementos esenciales para el cultivo, en concreto, 410 focos halógenos, un filtro de carbono, tres ventiladores, 29 transformadores, cinco motores de aire acondicionado y seis sistemas de climatización.